Written by #NOFILTER
Marzo y los pipopelandios creen que sigue siendo apropiado usar fur con estos calores. Sin embargo, su necedad y termostato no va a cambiar hasta en punto del 21 de marzo por más que yo lo diga.
Pero ese no es el tema ahora, sino que me adentro en mi nueva red social: Instagram. Y si bien me resistí desde el principio, finalmente caí dentro. Pero si Twitter ya elevaba demasiado el ego de las personas permitiendo exponer sus invaluables opiniones, veo que publicando nuestra vida en fotos es la cereza final para que nos eleven. Y es que, ¿cómo se logra que una realidad pueda ser recreada desde tantos ángulos? Ya no es, desde luego, el tomar una fotografía y subirla a un álbum como era al principio en Facebook, ahora se siguen una serie de pasos que coleccionan los “tesoros” de nuestro álbum de la vida.
En primer lugar, la foto ya no se enseña completa, se tiene ahora desde el inicio el alcance de recortarla y recortar con ello cualquier ruido que pueda turbar el mensaje que se quiera enviar a nuestros seguidores. Desaparecemos de inicio personas o fondos que arruinen el contexto de nuestra imagen librándola de cualquier elemento que pueda hacer decaer nuestro estatus social.
En segundo lugar, mi parte favorita, son los filtros. Cambiar colores, nublar o quitar colores en general, permite un cambio abismal de la fotografía inicial al resultado, que va desde ocultar imperfecciones en la piel de las personas, hasta hacer tres veces más grande y brillante un anillo de compromiso de lo que lejanamente recibió aquella incauta que nos lo presume como triunfo. Los filtros son eso y nada más: filtros que reducen cualquier margen de error que sólo los valientes nos atrevemos a no usar.
Es el conocer a las personas, ir al mismo evento, o ver las mismas cosas para entender cómo es que una persona puede manipular tanto una realidad para presentarla de diferente forma dependiendo de sus gustos y necesidades a exhibir. De esa posibilidad que nos ofrece Instagram, surge mi pregunta: si conociendo a la persona que sigo, frecuentando el mismo evento y habiendo visto las mismas cosas –que aparecen ahora irreconocibles en su perfil, como tomadas de una publicación de David LaChapelle—, ¿qué tan maravillosa o verídica es realmente su vida?
#GREATSPRINGSUMMER2014!
Allan Daniel
@AllanDanielHF
Last modified: 19 marzo, 2014
