Crónica de un estudio fallido

Written by | Como anillo al dedo, Opinión

liliana

La biblio. Ese lugar donde te dices a tí mismo que vas a ir a estudiar, pero terminas dormido en sus cómodos sillones. Donde estás comiendo papitas con tu amigo o amiga, diciéndote que “solo un capítulo más y ahora sí, se van a poner a estudiar”. Estudias un problema y, qué hambre hace, ¿no? Vas al K por un café, unas galletas, lo que sea que quite el hambre y con suerte te devuelva las ganas de estudiar o hacer la tarea.

Te encuentras con ese amigo/compañero que no habías visto, se quejan de la tarea que tienen, y te cuenta las novedades: reprobó tal examen, pero volvió con tal persona. Se despiden, porque, por mucho que quieras procrastinar, la persona ya se va y tú debes volver.

Regresas. Tu amigo te pseudoesperaba para resolver el problema, la lectura o “inserte trabajo de alguna materia aquí”. Lees la lectura por segunda vez, pero a la mitad de tu intento de ejercicio de comprensión, tu celular suena. Sí, según tú, lo apartaste, pero te llegó un whatsapp. No es de quién esperabas, así que lo ignoras. Continúas con la lectura. Lees la pregunta, le preguntas a tu amigo si le entendió. Él te dice que la verdad no. Tal vez deberían preguntarle a la listilla o listillo de la clase.

Le preguntas por qué tu amigo no tiene el número. Pasa un compañero de clase, preguntando si ya hicieron la tarea.

—No, ¿tú sí?.

—Tampoco — responde él mientras tú esperas que te contesten.

Por fin, llega la tan esperada respuesta.

—Pero a mí me salió otra cosa —dice alguien más que ya se ha unido al “grupo de estudio”.

—Pues a tal sí le salió y siempre le va bien —argumentas.

—Pero te juro que yo le pregunté a la maestra y todo, y me dijo que sí se hacía así.

Tu amigo le copia y el que no entendió te mira dudoso, como si tú tuvieras la respuesta. La verdad es que le crees más al inteligente de la clase, pero ella luce bastante segura. Le sigues la corriente, porque es más fácil así. Alguien tiene sed. Pensándolo bien, sí te hace falta otro café si vas a seguir con esta tarea, que no sabes ni cómo estás haciendo y esperas que en el examen te llegue la iluminación. Bajas, de paso compras unos chicles (dicen que sirven para mantenerte despierto) y te regresas. Ves tu cuaderno. Apenas llevas un problema y más de dos horas en biblio ¿en qué se te fue el tiempo?

Así se va el tiempo que dijiste que ibas a ocupar para realmente estudiar. Hasta te fuiste a biblio para ponerte serio. Más bien, terminaste en una crónica improvisada de todas las cosas que hiciste menos estudiar.

Liliana Sanchez Villanueva
liliana.sanchezva@udlap.mx

Last modified: 3 noviembre, 2016