¿Hasta qué punto se puede vivir de sueños?

Written by | Espacios vacios, Opinión

Me gusta creer que cada uno de nosotros, en algún momento, soñó con darle una parte de sí mismo al mundo para hacer de él un lugar mejor. Sin embargo, ese sueño parece perderse en alguna parte de nuestro interior. Tal vez se perdió en ti la primera vez que lo intentaste y fallaste, o la vez que te dijeron que era imposible. Tal vez algunos nunca recibieron el apoyo que necesitaban por parte de los demás, hay quienes dejaron de ver eso como un sueño y más bien como tonterías. Otros, simplemente, cambiaron ese sueño por uno que les diera dinero, 3 carros y una casa lo suficientemente grande para llenarla con bienes materiales, ya que a ellos mismos no los pueden llenar.

Podemos echarles la culpa a nuestros padres, a la escuela o a la sociedad, pero la verdad es que, al final del día, nosotros somos los que dejamos ir ese sueño. Sin embargo, para ser honesta, al final del día, nada de lo que hagan tendrá sentido si no ayudan por lo menos a una persona. Eso es lo que va a llenarlos, eso es lo que van a recordar toda su vida, no va a ser todo el dinero que ganen ni todas las cosas que tengan, si no el saber que algo de lo que hicieron tuvo valor en la vida de alguien más.

La mayoría de nosotros sabemos eso: sabemos que hay algo que en verdad necesitamos para poder ser “felices”. A pesar de ello, nos seguimos frenando, tal vez en algún punto nos volvemos más miedo que persona, lo cual es completamente absurdo. El miedo no es algo tangible, pero está ahí atrás de nuestra cabeza con cada decisión que estemos a punto de tomar. Siempre tenemos miedo, pero ¿miedo de qué? ¿De fracasar, quedar mal ante los demás, de que no salga bien? No sé en qué momento, pero llega un punto en donde las personas olvidan que, cualquier cosa que quieran hacer, pueden hacerla en este momento.

Quieres cambiar tu vida, cámbiala. Así de simple. Cambia la ropa que usas, córtate el pelo, ponte un tatuaje o cinco, deja de comer carne, entra a clases de ballet, renuncia tu trabajo y busca otro que en verdad te apasione, empieza un blog, borra tu Facebook, habla con esa persona que siempre has querido hablar. HAZ LO QUE QUIERAS, ¿qué más da?

En realidad, no tienes nada que perder y, si no sale como esperabas, busca otra cosa y así sucesivamente hasta que estés donde quieres estar, hasta que seas quien quieres ser. Pero hazlo ya. Solo así se empieza a vivir de sueños.

Diana Sofía Cortez Woo

dianacortezwo@udlap.mx

Last modified: 5 abril, 2017