Tragedia Humanística

Written by | Opinión

Cuando pienso en el pasado, me gusta imaginar lo que hacía la gente de mi edad; me imagino los tiempos en que se enseñaba latín en la universidad, la primera universidad en usar el Internet o cuando las mujeres empezaron a ir a clases. Esto me lleva a pensar en el futuro, ¿cómo se imaginarán las generaciones futuras el pasado? ¿Pensarán en lo que alguna vez fueron las clases de humanidades?

Estamos en el fin de una era. Las humanidades están desapareciendo de la vida universitaria. Con el nuevo plan de estudios ya en funcionamiento, poco a poco se han desvanecido algunas clases. Gracias a esto, me encuentro en la última generación en llevar la materia de Introducción Crítica a las Humanidades. Esta clase solía ser impartida para las carreras de Psicología Clínica, Psicología Organizacional y Humanidades. Si no han oído de la última licenciatura, es porque ya no existe. Tenemos la Escuela de Humanidades, pero el estudio general de las humanidades ha desaparecido en esta universidad. Poco a poco se fue perdiendo el interés por la carrera y, sin nuevas inscripciones, no quedó más remedio que cerrarla.

La importancia de las humanidades se está subestimando a un grado alarmante. Obvio que todavía existe un interés por parte de la Escuela de Humanidades, pero a las otras no les termina de caer el veinte. Cualquier carrera debe incluirlas, son fundamentales. Si las quitamos del currículum perdemos la preocupación por todo lo humano y por nuestra conexión profunda con la población de este mundo, ya sea pasada, presente o futura. El ingeniero se debe preocupar y tratar de entender a las personas que habitarán sus construcciones, el médico debe conectarse con su paciente, el deportista unificarse con su equipo y el mercadólogo debe ver por sus clientes.

Se nos está privando de la habilidad de conectar con la raíz humana que nos enlaza a todos a un nivel desconocido para cualquier otra especie. Las humanidades pueden hacer esa conexión aún más fuerte y las estamos dejando ir. En vez de eliminar la clase de humanidades, debería darse como parte del tronco común para todas las licenciaturas, así podríamos difundir su importancia.

Si seguimos en este camino, tendremos una sociedad desconectada con su pasado y con la inhabilidad de crear un futuro digno para las próximas generaciones. ¿Les gustaría vivir en un mundo así? ¿Vivir en un mundo eficientemente ignorante? No suena nada padre.

 

Anna Gabriella Cavagliano Martínez

anna.cavaglianomz@udlap.mx

@annagabriellacm

 

Last modified: 14 septiembre, 2018