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¿Qué está pasando en Puebla? Más que tratar de responder esta pregunta, me gustaría unirme a la pregunta. Llámese Ley Bala, distribuidor vial, el niño que murió en Chalchihuapan, y ahora la reciente expropiación de predios en Cholula para la construcción del Parque de las 7 Culturas, situaciones con un elemento en común: el descontento social provocado.
Poca transparencia, poca disposición a escuchar las demandas de la población, una extraña mezcolanza donde la línea que, de acuerdo a la teoría pura del derecho de Kelsen, debe existir entre derecho y política, se vuelve prácticamente invisible; ¿esto es Puebla?
La expropiación de tierras en Cholula se ha llevado a cabo de manera apresurada, previendo pagar precios por debajo del valor comercial, justificándose en protección cultural pero con un trasfondo preponderantemente comercial, y, por si fuera poco, con una fuerte movilización de la fuerza pública.
Dice el gobierno que ha cumplido con las formalidades de la ley notificando de las expropiaciones, pero la realidad es que notifican al mismo tiempo que se ocupan los predios, y entonces, ¿en dónde queda el derecho de las personas a ser escuchadas y vencidas en juicio?
No se trata de rechazar en automático cualquier proyecto en Cholula que involucre expropiar tierras (recordemos que la expropiación es un mecanismo legal del Estado para cumplir ciertos fines); pero -por el amor de Dios- que se trate a la gente dignamente, permitiendo que agoten los recursos legales que deseen interponer, integrándolos en la toma de decisiones y, claro, que todo proyecto se desarrolle por los motivos correctos, pues de otra manera seguiremos viendo legítimo descontento.
Dijo Robert Park que «la ciudad» es el mundo en que el hombre está (para bien o para mal) condenado a vivir, y es a través de ésta que intenta constantemente rehacerse a sí mismo. Por tanto, sea Cholula o cualquier otra, debe garantizarse que las ciudades reflejen el anhelo de sus pobladores, y no de la administración en turno, pues los gobiernos acaban, pero la esencia de la gente permanece.
RUBÉN ÁLVAREZ ESCOBAR
ruben.alvarezer@udlap.mx
Last modified: 27 septiembre, 2014
